'NACIONALINA' EN SANGRE

Hasta ahora nunca había ido a la procesión cívica del 9 de octubre en València. La apropiación de la Señera - símbolo de la ciudad - por parte del estamento político, bueno pues como que no me motivaba demasiado. Los niveles de “nacionalina” en sangre los tengo en límites estables, tirando a altos pero sin pasarse. No necesito medicación.

Pero ayer había que estar en la procesión cívica. Los trabajadores de RTVV fuimos a manifestar nuestro descontento por el ERE que se nos viene encima al Excelentísimo Gobernador Civil don Alberto Fabra (perdón ¿era President de la Generalitat?) y a otras autoridades allí presentes y procesionantes.

Pasado el grupo de políticos y cumplido el propósito de hacer presente y patente nuestra protesta, la procesión sigue con la incorporación de grupos de “blaveros” y grupúsculos de extrema derecha españolista (¿qué pintaban estos aquí?) Tanto unos como otros se encararon con el grupo de trabajadores de Televisión Valenciana con una agresividad y violencia inusitada. Agarrándose los testículos en actitud provocadora, levantando el brazo con el saludo fascista, irguiendo el dedo corazón en forma de peineta y con actitudes semejantes se mofaban de nuestro futuro laboral y nos gritaban lindezas como “a la puta calle” o “no vais a cobrar”. ¿Por qué? ¿Consideran que somos el ‘rojerío’ enemigo? ¿Consideran ‘catalanista’ a Canal 9? Pues anda, majetes hacéroslo mirar.